24 enero 2008

Fresh

Título original: Fresh. Año: 1994. Duración: 110 min. País: Estados Unidos. Director: Boaz Yakin. Guión: Boaz Yakin. Música: Stewart Copeland. Fotografía: Adam Holender. Reparto: Sean Nelson, Giancarlo Esposito, Samuel L. Jackson, Ron Brice, José Zúñiga, Luis Lantigua, N'Bushe Wright. Productora: Miramax.

En este mini ciclo de cine social que estoy haciendo me faltaba el mundo de la droga, el submundo tan castigado por la filmografía americana. Se hablaba bien de esta película de cine independiente y me he animado a verla en estos días inciertos donde un maldito virus está castigando mi ya sufrido esqueleto, asi que arropadito y con altas dosis de concentración me obligué a vencer el sueño para ver esta buena película.


Fresh es el correo de la droga de los camellos locales de Brooklyn, a sus doce años ya demuestra una inteligencia fuera de lo normal lo que le hace ganarse la confianza de los maleantes. La difícil situación familiar le hace jugar una especial partida de ajedrez con su vida, una partida demasiado compleja para un niño.

La frialdad de toda la película es exasperante, la vida de Fresh es precisamente eso, fría y eso para un niño es sumamente duro, el quiere mantener el control de su vida pero esa tarea es complicada en el mundo de la droga.

El breve papel de Samuel L. Jackson, modelando la mente de Fresh con sutileza es determinante en el desarrollo de la trama pero prescindible en el enfoque general, se agradece contar con él, pero se intuye que se ha hecho para contar con una base sobre la que iniciar el marketing. Contar con un actor de primera línea no hace que el resto de actores estén a la altura, en este caso algunas de las actuaciones se ven muy forzadas. No debemos olvidar que es una ópera prima y se notan algunas carencias y aún asi el resultado final es bastante bueno.

La fuerza inicial de la película, presentación de los personajes, algunos diálogos conseguidos, se pierde en cuanto el director, Boaz Yakin, se ahoga en la vida personal de los personajes, forzándo al espectador a participar de sus intimidades, eso diluye la atención en la trama que nos mantenía ensimismados, la utilización de un niño para los trapicheos. La resolución del argumento es demasiado infantil, demasiado fácil, demasiado irreal, pero el niñito Fresh (Sean Nelson) nos mantiene enganchados, tensos, expectantes...

Consigue su objetivo, que no es otro que entretener, pero abusa de los tópicos y de un vocabulario algo forzado que hace que un guión flojo se convierta en flojillo. Numerosos fallos estoy sacando a una ópera prima excelente que me he tragado sin respirar.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

No me acuerdo de si la he visto o no. Me suena, pero no me acuerdo. Ay la senilidad...

Twister dijo...

Pues merece la pena verla...

He buscado el trailer por la red pero no he podido encontrarlo, quizás me ha faltado paciencia.

Saludos